Diez razones para visitar Galicia

Galicia guarda infinitos secretos para los que deciden visitarlo una y otra vez. Si necesitas excusas para viajar al Norte (antes de perderlo del todo) aquí tienes diez argumentos impresdincibles. ¡Cuidado con las meigas! Porque es cierto: «haberlas, haylas«.

Galicia, “Galifornia”, hogar del peregrino, cuna de meigas… Podemos utilizar estos y otros nombres para hacer referencia al noroeste de España, pero preferimos que lo elijas por ti mismo. Galicia recibe con los brazos abiertos a todos los que deciden visitarla sea invierno, verano o primavera. Sus paisajes naturales, la peculiaridad de sus pueblos y sus gentes, su [incomparable] gastronomía, sus catedrales, monumentos y tradiciones… Todos los rasgos de su personalidad son motivo suficiente como para plantearse pasar un fin de semana en Galicia. Pero cada uno debe encontrar el suyo propio y sentir en sus propias carnes el concepto de morriña. ¿Quieres saber cuáles son nuestras razones para viajar a esta zona de España?

¿Qué ver en Galicia? Las excusas que necesitas para visitarla

1.- Llegar a la Torre de Hércules, Coruña.

Es el faro romano más antiguo del mundo en servicio y, desde 2007, uno de los monumentos del Patrimonio de la Humanidad. Situado en un cerro de unos 50 metros de altura, cuenta la leyenda que es el lugar en el que Hércules derrotó a Gerión.

2.- Disfrutar de alguno de sus balnearios.

La Toja, Lugo, Mondariz… Galicia está rodeada por agua, y no de la que cae del cielo. Por eso, una de las mejores formas de conocerla y mimetizarse con sus raíces es disfrutar de una parte de la visita en una de sus termas naturales.

3.- Combarro, tierra de hórreos.

La visita a uno de los pueblos con más encanto del concejo de Poio (Pontevedra) es casi una obligación. Sus hórreos y un bañito en la playa de la Lanzada (pasando por Sanjenjo, Portonovo…). Sí, desde Combarro a la Playa de la Lanzada hay unos 20 km, pero merecen la pena solo por conocer estos dos puntos de interés y todos los pueblos que los unen. Pontevedra desde las profundidades.

4.- Una noche en Cíes o en Ons.

Son islas hermanas, ambas pertenecientes al Parque Nacional de las Islas Atlánticas. ¿Qué te vas a encontrar? Playas, rutas en bicicleta y ambiente paradisiaco. Puedes visitarlas durante el día o quedarte a dormir en alguno de sus establecimientos hoteleros o sus zonas de acampada.

5.- Pasar la próxima noche de San Juan en Riazor o en Orzán.

Coruña es uno de los mejores destinos para celebrar esta especial velada de conmemoración del solsticio de verano.

6.- Sentir la magia de la Cascada de Ézaro.

En este post, os contamos todo lo que necesitas saber de este rincón inolvidable de Galicia. Si sigues nuestros consejos y decides visitarla en tu próximo viaje, no te olvides de parar también en el Cabo Finisterre, antaño, el punto más cercano al fin del mundo.

7.- Las verbenas de verano en cualquier pueblo de Galicia.

Hay festivales famosos que atraen la atención y la presencia de los más jóvenes en tierras gallegas. Pero si hay algo que gusta a público de todas las edades son las típicas fiestas de pueblo con orquesta. Imprescindibles.

8.- Encontrar un furancho.

Para comer, beber y entender la naturaleza y la tradición gallegas en su esencia. No son más que casas particulares que habilitan una de sus zonas para ofrecer al público vino, comida y licor café caseros. Lo mejor es contar con la ayuda de algún oriundo de confianza.

9.- Visitar el Monte de Santa Tecla, en Pontevedra.

En el sur y a un paso de Portugal, puedes [casi] tocar el cielo gallego desde este enclave único. Aquí te contamos algo más del Monte de Santa Tecla que, sin duda, debes visitar si decides viajar a Pontevedra en los próximos meses.

10.- Beberse Galicia en los viñedos de las Rías Baixas.

Cuna del Albariño, con su propio sello de Denominación de Origen, es una parada obligatoria en cualquier viaje a Galicia. Poco más tenemos que decir.

¿Qué excusas tienes tú para volver a Galicia?